jueves, 23 de agosto de 2007

Holocausto Bajuno (parte 1)

Has pensado alguna vez cómo es posible que la raza de los mantequeros (o canis,o bajunos, o pokeros, o chavs o como cojones se llamen allá donde vivas), sobrevivan. Piénsalo por un momento. ¿Has visto uno con más de 40 años?. ¿No será que palman antes?. Que ir con la motillo a pijo tendio sin casco (o con el quitamultas sin abrochar, y con la visera hacia atrás), o con el Seat Leon amarillo pollo (pa hacer juego con su pelo) diesel reprogramao, con faldones to guapos, a 200 km/h echando una manada de humo mientras queman el turbo en el viaje a la disco de pueblo correspondiente, puede ir en contra de su esperanza de vida.

Ellos, en la inocencia que tiene no pasar del IQ de un cigoto, no son conscientes de que el medallón de 2 kg de oro con el retrato de Camarón no constituye una coraza adecuada, y no les librará de una muerte temprana (lo del medallón no libró ni al propio Camarón).

Pero, eso sí, cuentan con un metabolismo más acelerado, que les permite tener dos crias a los 20 años. Suficiente para perpetuar la especie. Los conejos, ratones y topillos han sido objeto de copia.

Sólo queda esperar a que la Umbrella Corporation cree un virus que los esterilice a los 12 años. En un par de décadas se acaba el problema. Odio la eugénesis, pero esto es supervivencia de la espacie. Mientras sólo nos queda estudiar los especímenes que se nos presentan. ¿Qué pasa cuando le pones un micro delante a dos niñatas? Pues que tendrán que hacer otra cosa, porque hablar no saben. Sin más, laNoe y laJeni.



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